¿Cómo hacer una película sobre la memoria cuando no hay memoria? ¿De cuántas maneras puede construirse una identidad? Indudablemente, la identidad y la memoria están hechas de fragmentos, de palabras, experiencias personales y colectivas. Con el permiso de Yvonne Pierron y su testimonio, el de su familia y sus compañeros de lucha, se descifra esa identidad y memoria. Con la sensación de que sin memoria, no hay destino.
Cuando comenzamos el trabajo con Yvonne, ella tenía 86 años y su memoria se estaba diluyendo. Ella se daba cuenta de esta situación, y que solo recordaba algo en su idioma materno. Por eso, cuando no podía recordar alguna vivencia, ella sugería que hablemos con tal o cual amiga o amigo, depositario de su memoria. Ella armó su propia cartografía.
Fue un valor extra la capacidad de Yvonne para jugar a hacer la película, ya que su humor desacartonaba todas las situaciones compartidas. Con Yvonne intercambiamos guiños, éramos cómplices del juego del cine. Tuve la impertinencia de querer dirigirla, era ella quien marcaba el camino.
El proceso de creación fue acomodándose a la vida de Yvonne en sus dos últimos años. Ella se centraba cada vez más en su aquí y ahora, que era muy sencillo. Muchas ideas de puesta en escena que pensé en torno al aquí y ahora no funcionaron. Intenté hacer muchos más cruces y diálogos entre los distintos materiales pero en montaje se planteaban forzados. Tuve la dicha de que toda su familia, amigas y amigos me brindaran sus archivos, filmaciones, documentos, cartas, telegramas, fotos. Esa fue la materia prima, la memoria colectiva materializada.
Como artista me interesa plantear más dudas que certezas. Trabajar los grises y los márgenes, como en los que se movió Yvonne.
Marina Rubino
(Directora de Yvonne)
Yvonne se presenta en el Cine Gaumont hasta el 3 de abril a las 20.15 hs.
Mirá el trailer.
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